El Secretario General de Naciones Unidas, António Guterres, descartó por ahora la transición de la misión multinacional de apoyo a la seguridad (MSS en inglés) en Haití a una fuerza de mantenimiento de la paz de la ONU y, en cambio, recomienda crear una misión de apoyo de la ONU para respaldar la MSS, financiada a través del presupuesto de mantenimiento de la paz de la ONU.
“Tal transición podría considerarse una vez que se haya logrado un progreso significativo en la reducción sustancial del control territorial de las pandillas”, dijo Guterres sobre las fuerzas de paz de la ONU, en una carta enviada el martes al Consejo de Seguridad del organismo y obtenida por TDI Colombia.
“Una opción realista se basa en una estrategia de doble vía, en la que las Naciones Unidas asuman nuevos roles para permitir que el MSS, la policía nacional y las autoridades haitianas reduzcan sustancialmente el control territorial de las pandillas mediante la imposición de la paz”, dijo el jefe de la ONU. “Esto requeriría un mandato sólido para el uso de la fuerza y capacidades para llevar a cabo operaciones específicas contra las pandillas”.
Guterres envió su recomendación al Consejo de Seguridad el martes tras una solicitud de sus miembros de presentar una serie de opciones de la ONU. El MSS no es una misión de la ONU, pero cuenta con la autorización del Consejo de Seguridad y la ONU supervisa su fondo fiduciario financiero.
Sugiere establecer una oficina de apoyo de la ONU para que el MSS brinde apoyo logístico y operativo. Sería financiado con cargo al presupuesto de mantenimiento de la paz de la ONU, lo que le daría una financiación fiable.
Reforzar la misión internacional en Haití
El secretario general dijo que la MSS necesita capacidades de inteligencia más sólidas y más equipos, y debería reforzarse con unidades policiales especializadas para proteger la infraestructura crítica, incluidos puertos marítimos, aeropuertos, terminales petroleras y carreteras principales.
La nación insular ha estado plagada de violencia e inestabilidad de las pandillas desde 2021, cuando el presidente Jovenel Moise fue asesinado. La policía nacional carece de personal y está mal equipada y no ha podido detener a las bandas que aterrorizan a la población, especialmente en la capital, Puerto Príncipe. Actualmente existe un gobierno de transición con el objetivo de organizar elecciones creíbles, pero ha enfrentado desafíos internos y externos.
A fines del año pasado, Estados Unidos y Ecuador, entonces miembro del consejo y que eran codirectores de Haití en el consejo, habían pedido que el MSS se convirtiera en una operación de mantenimiento de la paz de la ONU. Pero no todos los miembros estuvieron de acuerdo. China y Rusia han expresado reservas sobre el envío de fuerzas de paz a Haití cuando no hay paz que mantener.
Las experiencias pasadas de Haití con misiones de paz de la ONU terminaron mal y originalmente se consideró que una misión ajena a la ONU. Pero la falta de financiamiento, equipo y logística ha llevado incluso al atribulado gobierno de Haití a aceptar la idea de una misión de paz de la ONU, que se beneficiaría de una financiación sostenible y del acceso a más recursos.
La MSS comenzó a desplegarse en junio y tiene mandato hasta el 2 de octubre de 2025. Guterres dijo que recientemente alcanzó el nivel de 1.000 efectivos. Provienen de Bahamas, Belice, El Salvador, Guatemala, Jamaica y Kenia, que lidera la misión. Pero 1.000 es menos de la mitad de los 2.500 efectivos previstos para la misión.
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La financiación ha sido un problema desde el principio. Guterres dijo que el fondo fiduciario de la misión tiene 110,8 millones de dólares en contribuciones voluntarias de Canadá, Francia, Alemania, Italia, Corea del Sur, Singapur, España, Turquía y Estados Unidos, de los cuales 48 millones de dólares no han sido asignados y se necesita mucho más.
«El MSS está asumiendo lentamente la forma de un verdadero esfuerzo multinacional para apoyar a Haití», escribió Guterres.
«Todos debemos respaldarlo como un esfuerzo inmediato y creíble para ayudar a la policía nacional de Haití a derrotar a las bandas armadas, impedir su expansión territorial y proteger al pueblo de Haití».
Añadió que cuando el MSS esté plenamente desplegado y dotado de los recursos adecuados, “representará la solución más viable para cumplir el objetivo a mediano plazo de reducir el control territorial de las pandillas”.
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