Meta se enfrenta a una demanda colectiva tras revelarse que descargó 82 TB de libros pirateados a través de torrents para entrenar su modelo de IA LLaMA. La compañía ha defendido sus acciones en los tribunales, argumentando que el uso de este material pirata constituye un caso de “uso justo” según las leyes de derechos de autor de Estados Unidos.
En su defensa, los abogados de Meta afirmaron que, aunque descargaron el contenido desde redes de torrents, en ningún momento compartieron los archivos con otros usuarios. Según su argumento, la infracción de derechos de autor ocurre al distribuir el contenido y no simplemente al descargarlo. Por lo tanto, afirman que no existen pruebas de que Meta haya compartido ilegalmente los archivos.
Meta defiende la piratería.
Además, documentos judiciales revelaron que el propio Mark Zuckerberg aprobó el uso del conjunto de datos LibGen, una biblioteca pirata ampliamente conocida, como fuente para entrenar la IA. Esta decisión desató fuertes críticas por parte de los autores afectados, quienes aseguran que sus obras fueron utilizadas sin consentimiento, violando sus derechos de propiedad intelectual.
La demanda podría establecer un cambio en la industria tecnológica, especialmente sobre el uso de contenido protegido por derechos de autor para entrenar modelos de inteligencia artificial. Si los tribunales fallan en contra de Meta, podría afectar a muchas otras empresas que dependen de grandes volúmenes de datos para desarrollar sus modelos.
Fuente: Ars Technica