Advertisement

más seguro, transitable y resistente a la intemperie

más seguro, transitable y resistente a la intemperie


Los paneles solares, la calefacción radiante por suelo radiante, la recolección de agua de lluvia, el compostaje, el reciclaje, la reducción del uso del automóvil y los recursos compartidos contribuyen a hacer de esta una forma de vida más respetuosa con el medio ambiente. 

Viviendas sostenibles y comunitarias: una nueva forma de habitar el futuro

Desde el exterior, esta comunidad puede parecer un conjunto de apartamentos convencionales o un típico complejo de casas adosadas. Sin embargo, una vez dentro, la diferencia es evidente. Este modelo de cohousing sostenible apuesta por la vida en comunidad, la eficiencia energética y un impacto ambiental reducido.

Un diseño pensado para la convivencia

El corazón de la comunidad es la llamada Plaza Hancock, un espacio diseñado para fomentar la interacción entre los vecinos. A diferencia de los barrios tradicionales, aquí las calles son peatonales, lo que permite encuentros espontáneos y reduce la contaminación acústica y del aire. Además, los espacios están diseñados para mantener una temperatura confortable durante todo el año, protegidos de la nieve y la lluvia, pero sin perder conexión con el exterior.

Cada calle cuenta con 34 viviendas, divididas en dos sectores de 16 y 18 unidades respectivamente. Hay una variedad de diseños: desde apartamentos de un dormitorio hasta casas de cuatro pisos, adaptándose a las necesidades de diferentes familias. Los propietarios compran tanto la vivienda como el estilo de vida comunitario que ofrece el cohousing.

Eficiencia energética y sostenibilidad

Este modelo habitacional no solo prioriza la vida en comunidad, sino que también está comprometido con la sostenibilidad energética. Algunas de las estrategias implementadas incluyen:

  • Energía renovable: Muchas de las viviendas están equipadas con paneles solares fotovoltaicos, lo que reduce la dependencia de la red eléctrica y disminuye las emisiones de CO₂.
  • Aislamiento térmico eficiente: Las viviendas han sido diseñadas con materiales aislantes de alto rendimiento, minimizando la necesidad de calefacción en invierno y refrigeración en verano.
  • Consumo responsable del agua: Se han instalado sistemas de recolección de agua de lluvia y dispositivos de ahorro de agua en grifos y duchas.
  • Huertos urbanos: La comunidad cuenta con huertos orgánicos donde se cultivan hortalizas, frutas y hierbas, fomentando la producción local y reduciendo la huella de carbono.

Un modelo de vivienda adaptable y resiliente

A lo largo de los años, la comunidad ha evolucionado para adaptarse a las necesidades de sus habitantes. Originalmente, todas las viviendas eran propiedad de sus residentes, pero con el tiempo algunas han sido alquiladas, permitiendo que más personas disfruten de este estilo de vida.

Una característica destacable es la versatilidad de los espacios. Muchas viviendas han sido modificadas para incluir suites en los sótanos, permitiendo la convivencia de múltiples generaciones bajo un mismo techo. Esto no solo optimiza el uso del espacio, sino que también fortalece los lazos familiares y comunitarios.

Espacios comunes para una vida compartida

Uno de los pilares del cohousing es la existencia de espacios compartidos, diseñados para fomentar la interacción y el sentido de comunidad. Entre ellos destacan:

  • Cocina y comedor comunitario: Lugar de reuniones y cenas compartidas, donde se organizan eventos y celebraciones.
  • Salón multiusos: Utilizado para actividades como yoga, clases de danza o reuniones comunitarias.
  • Taller de reparación: Un espacio donde los residentes pueden realizar arreglos y proyectos de bricolaje, optimizando recursos y reduciendo el consumo innecesario.
  • Lavandería común: Aunque cada vivienda tiene la opción de instalar su propia lavadora, más de la mitad de los residentes optan por utilizar la lavandería comunitaria, promoviendo el ahorro energético y de agua.

La importancia de la toma de decisiones comunitaria

Las decisiones en la comunidad no se toman de manera individual, sino a través de un proceso de consenso. Esto implica que cualquier cambio estructural o modificación en las normas de convivencia es discutido y acordado por todos los residentes. Este modelo promueve la participación activa y refuerza el sentido de pertenencia.

Un modelo de vivienda para el futuro

Este tipo de comunidades representa un modelo de vivienda innovador que combina sostenibilidad, eficiencia energética y vida en comunidad. Frente a la creciente urbanización y el aislamiento social de las grandes ciudades, el cohousing surge como una alternativa viable para quienes buscan un equilibrio entre privacidad y convivencia, además de un estilo de vida más ecológico.

Este modelo demuestra que es posible crear espacios que reduzcan el impacto ambiental, promuevan la autosuficiencia energética y fortalezcan los lazos comunitarios. Sin duda, este tipo de desarrollos serán clave en la transición hacia un futuro más sostenible y humano.

Más información: windsong.bc.ca

Vía faircompanies



Fuente

¡Aviso de Facebook para la UE! ¡Necesitas iniciar sesión para ver y publicar comentarios de FB!
Enable Notifications OK No thanks