El problema del stock limitado de las NVIDIA RTX 50 ha alcanzado un punto crítico, y los socios de la compañía, como MSI y ASUS, han decidido tomar cartas en el asunto. Con la falta de disponibilidad de GPUs y unos precios oficiales (MSRP) demasiado ajustados, los fabricantes han comenzado a inflar los precios de sus modelos personalizados en sus propias tiendas. La situación se ha vuelto tan extrema que algunas RTX 5090 han subido hasta un 70% sobre su precio recomendado, haciendo que la barrera de los 3.400 dólares sea una realidad en algunos casos.
La estrategia de NVIDIA de establecer precios MSRP agresivos sin garantizar un stock suficiente ha generado un efecto dominó en el mercado. Por un lado, los consumidores no pueden encontrar tarjetas a precios oficiales, y por otro, los ensambladores se ven obligados a subir los precios para compensar sus márgenes. Esto se traduce en aumentos considerables: la RTX 5080 VENTUS 3X de MSI, por ejemplo, cuesta 140 dólares más de lo recomendado, mientras que la RTX 5090 más barata está 750 dólares por encima de su precio oficial.
Las RTX 50 aumentan muchísimo de precio.
El mayor escándalo lo protagoniza ASUS con su RTX 5090 ROG ASTRAL LC, que actualmente se vende por 3.409,99 dólares, un 70% más cara que su MSRP original de 2.000 dólares. Este fenómeno sugiere que los ensambladores se han visto forzados a romper con la política de precios de NVIDIA, o simplemente han aprovechado la situación de escasez para maximizar sus beneficios a costa de los consumidores. En este escenario, las únicas tarjetas que aún respetan el MSRP son las Founders Edition, que NVIDIA vende directamente.
Si NVIDIA no actúa pronto reduciendo los costos de producción con TSMC o asegurando una distribución más amplia de chips a sus socios, el mercado podría seguir el camino de EVGA, que abandonó la fabricación de tarjetas gráficas precisamente por este tipo de conflictos. La burbuja de precios de las RTX 50 está alcanzando niveles insostenibles, y si la tendencia continúa, las GPUs de alto rendimiento podrían quedar fuera del alcance del usuario promedio.