Caracas, 19 ene (EFE).- El Ministerio de Interior de Venezuela informó este domingo que las autoridades han atendido a un total de 812 colombianos desplazados por los combates entre la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y una disidencia de las FARC en la convulsa región fronteriza del Catatumbo, que ha dejado más de 80 muertos.
«Un total de 812 desplazados han sido asistidos en los cuatro puntos de atención humanitaria, instalados por el Gobierno bolivariano en el municipio Jesús María Semprún, estado Zulia, desde el jueves hasta este domingo», señaló la cartera de Estado en una publicación en Instagram.
Asimismo, dijo que el viceministro para Gestión de Riesgo y Protección Civil, Juan Carlos Oti, llevó a cabo una supervisión en la que constató la atención que se brinda a los ciudadanos en materia de salud, comida, transporte y «garantía de identidad».
«Entre los asistidos se encuentran 352 hombres, 258 mujeres y 202 niños en los corredores humanitarias en los puntos kilómetro 16, Destacamento de Comandos Rurales 11-1 ‘Mi Ranchito’, Puente Ecuador y la Escuela Esmirda de Muñoz, centros de apoyo que reciben a los afectados», añadió.
El Gobierno colombiano y las Fuerzas Militares están centrados en el envío de ayuda humanitaria y el rescate de personas en riesgo por los combates entre el ELN y una disidencia de las FARC en la convulsa región del Catatumbo, noreste del país, cerca de la frontera con Venezuela, que ha dejado más de 80 muertos, informaron este domingo las autoridades.
«Se ha producido la extracción de importantes líderes de la región, de firmantes de paz, pero también de familias de firmantes», explicó el ministro de Defensa, Iván Velásquez, tras un consejo de seguridad en Cúcuta, capital del departamento de Norte de Santander, donde se están produciendo los enfrentamientos.
El Gobierno está evaluando las necesidades y los recursos y este domingo llegó un avión de Bogotá con 25 toneladas de ayudas para las personas que están en albergues de Ocaña, la principal ciudad de la zona, donde se ha refugiado buena parte de la población rural del Catatumbo.
La situación en algunas zonas rurales del Catatumbo sigue siendo confusa después de que el jueves el ELN comenzara una ofensiva contra una disidencia de las FARC, un frente del Estado Mayor de los Bloques (escisión del Estado Mayor Central), que ha puesto en jaque a la población.
El presidente colombiano, Gustavo Petro, que el viernes visitó Tibú, anunció la suspensión de los diálogos de paz con el ELN, al que acusó de cometer «crímenes de guerra» en el Catatumbo y del que dijo que no tiene «ninguna voluntad de paz».
La negociación está suspendida hasta que el ELN definitivamente decida «caminar hacia la paz» porque «este país no aguanta más estos vaivenes», explicó por su parte la jefa de la delegación del Gobierno en los diálogos, Vera Grabe. EFE