Hyme Energy y Arla Foods están desarrollando un sistema de almacenamiento térmico de 200 MW y 200 MWh en Dinamarca, diseñado para descarbonizar procesos industriales.
La empresa tecnológica Hyme Energy, junto con su posible cliente Arla Foods, está solicitando financiación de la Unión Europea para un ambicioso proyecto de almacenamiento térmico de energía de 200 MW, que podría convertirse en el más grande del mundo. Este sistema de almacenamiento térmico está diseñado para una planta de producción de leche en polvo en Dinamarca, propiedad de Arla Foods, una de las cinco principales empresas de productos lácteos a nivel global.
El proyecto, con una capacidad de almacenamiento de 200 MWh, utilizaría una tecnología patentada de almacenamiento térmico basada en sales fundidas desarrollada por Hyme Energy. Esta tecnología permite convertir la electricidad en calor, almacenarlo en tanques de sal fundida a temperaturas superiores a 500 °C y utilizarlo posteriormente en procesos industriales, como la producción de leche en polvo en la instalación de Holstebro. Este enfoque no solo busca reducir significativamente las emisiones de CO2, sino también generar ahorros de costes operativos para Arla.
Una solución para industrias intensivas en energía
El sistema propuesto está diseñado para industrias que demandan calor de proceso a altas temperaturas, como las de alimentos y bebidas, productos químicos y metales. Hyme Energy asegura que su tecnología puede ser una solución clave para descarbonizar sectores industriales intensivos en energía, proporcionando una alternativa rentable y sostenible al uso de combustibles fósiles.
David Boulanger, vicepresidente ejecutivo de la cadena de suministro de Arla Foods, destacó el potencial de esta tecnología, calificándola como un «avance real con una gran promesa para reducir el consumo de combustibles fósiles«. Arla ha logrado reducir su huella de carbono en un 37 % desde 2015 y se ha comprometido a alcanzar una reducción total del 63 % para el año 2030.
Un modelo replicable para el futuro
Hyme Energy considera que este proyecto servirá como un modelo para futuras implementaciones en industrias de todo el mundo. Según Nis Benn, director de operaciones de Hyme Energy, este sistema demuestra que es posible reducir las emisiones de CO2 en industrias a gran escala de manera factible y económica. Benn también hizo un llamado a otros líderes de la industria para unirse a la transición energética.
Hyme ya ha demostrado el potencial de su tecnología con su primer sistema de almacenamiento térmico a escala de megavatios, una instalación de 1,2 MWh en el puerto de Esbjerg, Dinamarca, que entró en operación el año pasado. Este precedente refuerza la viabilidad técnica y comercial del proyecto en Holstebro.
Perspectivas globales del almacenamiento térmico
La descarbonización del calor industrial representa un área de enorme potencial para la transición energética. El uso de energía renovable para calentar materiales como la sal está siendo explorado por otras empresas tecnológicas, incluidas Kyoto Energy, también con sede en Dinamarca, y proyectos similares en países como Chile y China.
Otros medios de almacenamiento térmico que están ganando tracción incluyen ladrillos de arcilla, como los desarrollados por Rondo; materiales similares a la arena, utilizados por Polar Night Energy; y estructuras de concreto, diseñadas por Storworks. Cada enfoque destaca la diversidad de tecnologías en desarrollo para abordar las necesidades de calor industrial sostenible.
Próximos pasos y expectativas
Hyme Energy y Arla Foods aún dependen de la aprobación de fondos de la Unión Europea para avanzar con la implementación del proyecto. Una vez asegurada esta financiación, se establecerán las bases finales para su ejecución. Aunque aún no hay una fecha confirmada para su entrada en operación, este sistema tiene el potencial de ser un hito en la transición energética industrial, marcando un antes y un después en el camino hacia una economía baja en carbono.
Este proyecto representa un claro ejemplo de cómo la innovación tecnológica y la colaboración internacional pueden abordar los desafíos climáticos globales mientras se generan beneficios económicos y ambientales.
Más información: www.hyme.energy